miércoles, 27 de julio de 2011

“Casablanca”

Origen: E.E.U.U. (1942). Dir: Michael Curtiz. Prod: Hal B. Wallis. Guion: Julius J. Epstein, Philip G. Epstein y Howard Koch, basado en la obra teatral “Everybody goes to Rick’s”. Música: Max Steiner. Fotog: Arthur Edeson. Montaje: Owen Marks. Protags: Humphrey Bogart, Ingrid Bergman, Paul Henreid, Conrad Veidt y Peter Lorre. Duración: 102 minutos.

 
“Casablanca” es uno de los ejemplos más notables del cine de equipo de un estudio cinematográfico estadounidense (en este caso, la Warner Brothers). Posee un guion ingenioso, un ritmo que no decae en ningún momento, una excelente fotografía y buenas interpretaciones. La historia es sumamente atractiva y está hábilmente narrada. Puede apuntarse cierta artificiosidad y falta de realismo en algunas escenas y una simplificación excesiva en la presentación del contexto histórico. Pero debe tenerse en cuenta que “Casablanca” es una película romántica realizada en uno de los períodos más brillantes del cine de Hollywood. No puede escapar a la sofisticación ni dejar de apelar al glamour de sus estrellas. Dos de sus méritos más evidentes son el humor y la ironía que zumban constantemente. En algunas escenas, los diálogos son brillantes.
 
El dúo protagónico impone su sello. Bogart destaca en el papel de héroe existencialista y la Bergman aporta su magnifica presencia, su encanto y su justa expresividad. Además, algunos de los actores secundarios –particularmente Claude Rains– están impagables.
 
Varios factores –la amable sintonía entre la solidez y la sencillez narrativa, el héroe romántico (que cimentó el mito Bogart), el ritmo y la química entre las dos estrellas– han convertido a “Casablanca” en una película de culto, manteniendo su prestigio entre los espectadores de diferentes épocas. Asimismo, dentro del contexto “Casablanca” algunas escenas se han convertido también en objetos de culto, como ocurre con el reencuentro entre Bogart y la Bergman, mientras Dooley Wilson canta “Según pasan los años”, y el final, con la despedida de los mismos protagonistas en el aeropuerto.
 
“Casablanca” obtuvo ocho nominaciones para los Oscars de 1943, ganando tres: mejor película, mejor director y mejor guion adaptado. Es una de las películas más celebradas por el público en toda la historia del cine. Ha sido evocada en varios films posteriores; uno de ellos “Sueños de un seductor” (“Play it again, Sam”), dirigida por Herbert Ross en 1972 e interpretada por Woody Allen y Diane Keaton. Este film concluye con una elocuente referencia a la escena final de “Casablanca”.   

0 comentarios:

Publicar un comentario

Share

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More